La boda de Leticia y Juan Luis en Jerez

El pasado verano se celebró en Jerez la boda de Leticia y Juan Luis, unos novios con solera que se casaron en la Iglesia de los judíos de San Mateo y luego lo celebraron en la Escuela de Arte Ecuestre de Jerez, una boda con mucho arte… 
Las fotógrafas de esta boda son Volvoreta Bodas, un equipo que nos encanta como trabaja y sabe captar todas las emociones que se viven durante una boda. 

«El vestido fue un diseño de Covadonga Plaza.» Nos ha gustado mucho por su sencillez pero a la vez con mucha clase.

 Una idea divertida: «Yo quedé con todas mis amigas en el hotel para hacernos fotos divertidas y relajadas, ya que luego en el cocktel siempre estás más pendiente de otras cosas.  Y si no quieren contratar video (cosa que yo recomiendo que si hagan porque es un recuerdo en vivo muy chulo), que dos amigos cercanos uno por cada lado coja cámaras y haga videos a los conocidos, preguntando cosas sobre los novios, haciendo las bromas que hay en cada grupo, familia, etc…así los novios podrán tener un recuerdo de momentos que ellos no han podido vivir.»

El cocktel y cena en los jardines de la Real Escuela de Arte Ecuestre y las copas en el museo del enganche que está cruzando la calle.   El catering de la Real Escuela (Las Vides) estuvieron más que sobresalientes.

Hubo muchos detalles que los invitados agradecieron un montón: limonada y agua a la salida de la iglesia, cubre tacones para las chicas ya que el cocktel era en jardín y grupo de jazz amenizando el cocktel.

Lo más diferente que se nos ocurrió fue: entre plato y plato para hacer un poco la amena la espera de esos minutos que tarda el catering:  hicimos unas chapas con mensajes diferentes (soy el próximo, el soltero de oro, lo que diga mi mujer, soy la más divina, temo la resaca de mañana, yo me emborraché con el novio , la última y nos vamos, viva la barra libre, gracias por casaros, tenía ganas de juerga, …) y las metí en una bolsita por mesa seleccionando las chapas dependiendo de la gente que hubiese en cada mesa.  Cada bolsita se entregaba a una persona de la mesa encargada de repartirlas a su elección (como se le indicaba en una nota que iba dentro).  Se lo pasaron genial con las chapas!!!